El MIP (IPM, por sus siglas en inglés) es una combinación de sentido común y principios científicos. Es una manera de pensar sobre el manejo de plagas que valora:
El uso del conocimiento sobre los hábitos, el ciclo de vida, las necesidades y aversiones de la plaga
El uso de los métodos menos tóxicos en primer lugar, hasta e incluyendo los pesticidas
El seguimiento de la actividad de la plaga y ajuste de los métodos con el tiempo
Tolerar plagas inofensivas, y
El establecimiento de un umbral para decidir cuándo es el momento de actuar
Estas acciones son parte importante de cualquier esfuerzo de MIP:
Identifique la plaga en los términos más específicos posibles
Aprenda sobre la biología de la plaga (hábitos, ciclo de vida, necesidades y aversiones)
Si es posible tome medidas para excluir la plaga del área
Trate de eliminar alimentos, agua y refugio para la plaga
Determine los patrones de viaje y encuentre el hogar-base de la plaga
Identifique todas sus opciones de control (las “herramientas en la caja de herramientas”) antes de actuar